jueves, 13 de diciembre de 2012

Los bajos salarios del Museo Nacional de Ciencias Naturales, el trastrueque de jerarquías, los nombramientos honoríficos: una larga tradición a lo largo de dos siglos que se mantuvo hasta la actualidad.

Hugo P. Castello, 2012.  MACN:  en comisión en la Fundación de Historia Natural "Félix de Azara".

Primera rebelión: 27 de Octubre de 1930
El Prof. Martín Doello Jurado fue director entre los años 1923 y 1946, durante su extendido ejercicio de la dirección a lo largo de 22 años debió soportar dos rebeliones de sus empleados, una en 1930 y la otra en 1944-45. Esta última le costó su cargo.
Durante la “Rebelión de los paleontólogos “en 1930 en contra del director del Museo, Prof. Martín Doello Jurado, algunos de los argumentos presentados por los “rebeldes” ante el Ministro de Instrucción Pública fueron:
Porque el señor Doello Jurado ha perjudicado la reputación del Museo y su personal, enviándolo a comisiones científicas sin los recursos indispensables y con la consigna de mendigar…. (No.11)”
“Porque a pesar de haber multiplicado las adscripciones y subdivisiones de  cada sección, no ha estimulado otra cosa que las vanas apariencias, dado que ha entorpecido  la eficaz actividad investigadora y puesto trabas para que la efectuada se consigne en los “Anales” del establecimiento” (No.16)”.
También se mencionaba “porque ha carecido de ecuanimidad en las retribuciones en dinero al personal adscripto, pues mientras lo ha hecho con algunas personas ha dejado de hacerlo con otras que notoriamente mas lo han merecido por su asiduidad y la importancia de su labor” (No.17).                                                         
A ello se agregaba “porque ha desquiciado las jerarquías al designar “Encargado de Sección” a ciertas personas cuyo empleo es el de “preparador” o “ayudante de preparador”, mientras otras de igual categoría permanecen en los puestos que por denominación les corresponden, sin contar que hay un “preparador” que es encargado de la biblioteca” y otro que cumple funciones enteramente administrativas, con lo que, además ha sustraído a las secciones personal técnicos que les es indispensable” (No.18).
Rebajar los títulos emanados de la UBA haciendo designar para el cargo de “ayudante preparador” a un doctor en ciencias naturales y propuesto para igual cargo a un ingeniero agrónomo” (No. 20).
 (Ver mas información al respecto en: La Rebelión de los paleontólogos de la calle Perú: Partes I - V).

Segunda rebelión: 17 de Septiembre de 1944:

La Liga Argentina de Empleados Públicos (Seccional No. 128, MACN)
La  Liga Argentina de Empleados Públicos creada en 1930 fue la antecesora de la actual Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN)  que en la década de 1940 estableció fuertes vínculos con Juan Domingo Perón, en ese momento a cargo de la Secretaría de Trabajo y Previsión (Ver Discursos de Perón 21/9/1944).
Estimamos que fue el accionar y reclamos de la Liga de Empleados, alguno de cuyos integrantes pasó información al diario “El Federal”, fue la que precipitó mas tarde la renuncia del Director Doello Jurado a  mediados de 1946 quien a su vez solicitó la jubilación, dando lugar a que fuera designado en su reemplazo el Dr. Agustín Riggi, que era un geólogo mal pago del staff del Museo quien posteriormente demostró tener fluidos vínculos con el gobierno del Gral. J. D. Perón.
Sin embargo entre la publicación del breve artículo en el “El Federal” (19/9/1944)  y la renuncia de Doello Jurado ocurrieron varios hechos que vale la pena mencionar.
La segunda rebelión comenzó con la publicación de un artículo anónimo periodístico publicado en el “El Federal” (17/9/1944) en el que entre otras afirmaciones  se mencionaba  que “mientras en casi todas las reparticiones de índole científica o técnica se han realizado o se están realizando en el orden administrativo o en el régimen burocrático, una obra equitativa en el sistemas de ascensos y aumentos de sueldos al personal, en el Museo Argentino de Ciencias Naturales subsiste aun una situación de real coloniaje, que evidentemente está en pugna con los postulados de saneamiento administrativo, impuesto por la Revolución.
En cualquier repartición de índole parecida a la que nos ocupa, un empleado con varios años de servicio puede llegar a ganar un sueldo, que sólo algunos de los empleados de dicho Museo que están por jubilarse, alcanzan. A esto se suma el hecho inadmisible de que si algún empleado solicita consideración a su capacidad de trabajo e idoneidad y la aplicación del escalafón, se lo invita que se gestione el traslado, para no quebrar el orden preferencial que reina, haciendo caso omiso del justo escalonamiento, lógico en cualquier escalafón, que supone el ascenso al puesto inmediato superior, por el contrario se sobrepasan a varios empleados, sin que se justifique la arbitraria disposición, quitando a quien lo merece la oportunidad de mejorar su posición siquiera sea en pequeña escala, cuando no son los recién llegados quienes taponan el camino a antiguos empleados.”
El artículo menciona la existencia de “grupos preferidos” fomentados por las autoridades de la casa y da como ejemplo: “Esta preferencia se traduce en el cobro de sobresueldos sin que el horario ni el trabajo lo justifiquen; creando por esas razones preferencias y prebendas acerca del cumplimiento de las funciones y horarios, que son negados a otros aún en casos de auténtica necesidad. Mientras que hay empleados que han alcanzado los quince años de servicio ganando sueldos menores de 100 pesos mensuales, existen ex jefes y encargados que gozan de una jubilación del Estado, pero que no obstante cobran “trabajos extras”, injustificados totalmente, por sumas vergonzosas, y que son de peregrinos resultados, al desconocerse siempre los resultados prácticos de los mismos en lo que se refiere a los viajes de exploración y recolección que realizan los empleados por distintas regiones del país, son efectuados sin viático alguno y solo con sumas desproporcionadas al esfuerzo exigido”.(Catorce años después, en este párrafo del artículo se repiten casi los mismos argumentos esgrimidos  por los paleontólogos en rebelión contra el mismo Director  en 1930).

El orden de los sucesos que llevan a la renuncia del director Doello Jurado

1) El 3 de Mayo de 1943 y el 19 de agosto del mismo año el Director Doello Jurado realiza propuestas escritas al Ministro de Justicia e Instrucción Pública, Dr. J. H. Silgueira, para que el gobierno decida la provisión de las pocas vacantes de cargos para “científicos, técnicos y docentes” que existían disponibles en el  MACN, institución en la que existían muchos candidatos con antigüedad y méritos suficientes para cubrirlas.
2) El Poder Ejecutivo en  Acuerdo de Ministros  autoriza por Decreto Nacional la provisión de las vacantes el  31/1/1944. 
La lista de candidatos a cubrir las vacantes por corrimiento fue:
a) El Sr. Aurelio Pozzi, Encargado de las colecciones de Peces y Jefe interino de la Sec. Vertebrados, que propuesto para cubrir la vacante de  Oficial de 9ª pasó  a Jefe de la Secc. de Peces, Cetáceos y Pinnipedios.
 b) El Sr. Romeo Croce, Auxiliar de 6ª., interinamente en el puesto de Encargado de Mineralogía, quedó efectivo.
c) El Dr. A. F. Bordas, en ese momento Auxiliar  8º. de Paleontología, pasó a cubrir  la vacante de Encargado de Paleontología como Auxiliar 2º.
d) Para cada una de las vacantes que se produjo como consecuencia de las propuestas de ascenso, se propusieron a otros empleados, a saber: Manuel José Viana, en ese entonces Ayudante Mayor. Jesús Sconcia cubriría la vacante dejada por Viana.
Pablo Gregorio Haedo cubriría la vacante de Bordas. Esteban Caride cubriría la vacante de Sconcia y H. C. Hepper, la vacante de Caride. El Sr. E. Oliveto cubriría la vacante de  Haedo y B. J. Comesaña la vacante de Oliveto.
3) El 24 de marzo de 1944 la resolución ministerial fue comunicada a cada uno de los interesados.
4) Se publica el artículo anónimo en el diario “El Federal” el 17 Septiembre de 1944 en el que se hace mención (ver más arriba) a la existencia de “grupos preferidos”.
5) Los empleados del MACN hacen cargos escritos el 18/9/1944 contra la dirección y se inicia un expediente en el Ministerio de Instrucción Pública No.V.1.1944
6) Doello Jurado escribe una nota al Ministro de Instrucción Pública fechada el 19/9/194 de seis paginas de extensión, otra el 30/12/1944 y una segunda nota el 7/1/1945, cuya copia la reenvía el 13/5/1945 al escribirle al Subsecretario.
7) El Prof. Martín Doello Jurado solicita acogerse a la jubilación, nota fechada 6/11/1944.
8) El 15 de Diciembre de 1944 la Secc. No. 128 del MACN de la Liga de Empleados públicos eleva un reclamo junto con un “Memorial” de ocho páginas y tres apéndices al Coronel Juan D. Perón, en ese momento Secretario de Trabajo y Previsión Social. En dicho memorial se repasa la historia del Museo, se mencionan cuales son sus funciones y se detalla la situación precaria del personal del Museo, a pesar del extraordinario incremento material y científico del Museo. Se destaca que desde 1930 (la rebelión de paleontólogos) el Gobierno Revolucionario sólo ha concedido un pequeñísimo incremento de su personal y de sus recursos, que no han tenido un aumento efectivo desde ese año. Se menciona que:
a) la remuneración de su personal es tan baja que no tienen paralelo con la de ninguna otra repartición pública
 b) que su personal es tan reducido que se halla incapacitado para atender las diversas necesidades del museo.
Se dan ejemplos de gran injusticia y una lista de empleados que lograron el pase a otras reparticiones públicas para poder vivir, en detrimento de la institución. Por último se realiza una propuesta de aumento de personal y de gastos para el Museo.
La Liga le solicita al Coronel Perón para que se apruebe un proyecto de aumentos presentado ante el Ministerio por las autoridades del Museo el 30/11/1944. y se equiparen los salarios del personal del museo con el de otras reparticiones de la Administración Pública (Firman: Alberto Aiello, Secretario y Eduardo Casanova, Presidente).
9) El 12 de Junio de 1945 Doello Jurado  realiza una especie de “descargo” por escrito de 44 páginas de extensión dirigido al Subsecretario de Instrucción Pública, Dr. O. de la Rosa Igarzabal, en relación con el artículo de menos de una página del diario "El Federal” (19/9/1944).
10) El Presidente de la seccional envía un telegrama de fecha 3/4/1946 dirigido al Presidente Perón, y el día 5/4/11946 lo derivan al Ministerio de Justicia e Instrucción Pública.
11) El 13 de abril de 1945 las autoridades de la Secc. No.128 convocan a los afiliados a la Asamblea Interna Ordinaria para informar sobre la actividad desarrollada.
12) El  24 de abril de 1946 las autoridades de la seccional reiteran la solicitud ante el entonces Secretario de Trabajo y Previsión, Capitán® Héctor F. Russo y adjuntan una nueva copia del Memorial.
13) El Prof. Martín Doello Jurado cesa en el cargo de Director, a la espera de los trámites de jubilación. En su lugar es designado el Dr. en Geología Agustín Eduardo Riggi, que anteriormente y a pesar de estar doctorado gozaba de un salario de 160 mensuales.
El Dr. A. Riggi había conseguido cargos importantes previamente en su carrera profesional: Profesor del Colegio Militar de la Nación y de la Escuela Superior Técnica de Guerra que le valieron amistad con algunos militares, entre ellos el Coronel J. D. Perón, que sería decisivo en su futura designación como director del MACN (Parodiz y Balech, 1992).

La posible motivación que impulsó a la CD de la Seccional No. 128 de la Liga Argentina de Empleados Públicos, organismo gremial del MACN.

Uno podría creer que en el MACN el descontento salarial habría sido el motivo principal para que numerosos empleados se afiliaran. Sin embargo entre los afiliados que luego resultaron electos para integrar la lista de autoridades con 6 integrantes de la Comisión Directiva (1944-1946) de la Seccional, se encontraban tres empleados que gozaban salarios de $ 500 mensuales (E. Casanova, A. Pozzi y S. Siciliano) quienes, en relación con los demás salarios que se abonaban en 1944, parecían estar bien pagos.
Dos de los integrantes de la C. D. gozaban salarios de Oficial de 9ª  ($500) y el siguiente era el Secretario  General del MACN ($ 500), quien durante décadas siempre  el funcionario de mayor prestigio, después del director del museo.
Este hecho permite suponer que el tema salarial no fue el único motivo que los llevó a afiliarse, sino que aparentemente las arbitrariedades y abusos que se cometían en el MACN estuvieron presentes, en parte,  al tomar esa decisión.

Comentario final
Los trastrueques de jerarquías, los bajos salarios del personal SINEP y los nombramientos honoríficos se han mantenido como un mal endémico del Museo hasta la actualidad (2012).
El MACN es una institución del estado nacional con mas de 250 empleados, científicos, técnicos y becarios que es administrada por dos empleados SINEP, un Secretario General y un Jefe de Administración que cobran en función de su responsabilidad, en tanto el Jefe de Personal, el Jefe de Museología, la Jefa de Biblioteca, el Jefe de Despacho y Archivo, los “encargados” de la Estación Hidrobiológica de Pto. Quequén y de la Estación de Corrientes, son honoríficos, al igual que hasta poco tiempo atrás todos los jefes de División y numerosos otros cargos honoríficos que fueron creados por la dirección del MACN en el período 2011-2011.El MACN se convierte así en un caso único en la Administración Nacional, donde los empleados aceptan cumplir con funciones administrativas y científicas sin la remuneración que corresponde de acuerdo con sus responsabilidades. El poder agregar esas designaciones “honoríficas y pomposas en sus Curriculum Vitae alcanza aparentemente para alimentar su ego y los paraliza a los efectos de reclamar y obtener lo que les corresponde legalmente.
                     
Bibliografía                                                                                                                                                                                                                                                          
                                                                                                                        
Parodiz, J. J. y E. Balech. 1992. El Museo Argentino de Ciencias Naturales “B. Rivadavia”…en pantuflas. Mimeo: 90 pp. Buenos Aires.

Perón, J. D. 1944.  Discurso en la concentración de empleados de Correos y Telecomunicaciones  (21/9/1944) (Discurso de Perón en la concentración de empleados de Correos y ... www.constitucionweb.com/.../discurso-de-perón-en-la-co).

MACN Expediente E 901/945: copia del informe de la Dirección del MACN, fecha: 14/7/1945, Expediente: V.I. 1944.

Los salarios de los empleados del MACN en Marzo de 1937 y la situación salarial del Director del MACN después de la rebelión de los paleontólogos.

Hugo P. Castello, 2012.  MACN: en comisión en la Fundación de Historia Natural "Félix de Azara".

La planta de empleados permanentes del MACN se había incrementado a inicios de 1937 a la cifra de 72, entre  los cuales el Director, el Prof. Martín Doello Jurado ganaba la suma de $ 887 y le seguían, el Secretario Salvador Siciliano con $ 460; el botánico Alberto Castellanos con $ 447, José Imbelloni  $ 449; Antonio Pozzi, 458; José Yepes, 455; Eduardo Casanova, $ 444 y otros dos empleados con salarios de $460 y $ 318 respectivamente.
Los Sres. J. Cardoso y Emilio Gemignani, percibían salarios de $ 322, en tanto el malacólogo Alberto Carcelles, $ 319 y E. Palavecino, $293.
Los demás salarios abonados fluctuaban entre  los $ 271- $299 (5), $214-$230 (8); $ 170- $184 (13); $ 34-$ 92(13); $ 147 (13); $ 80-$ 174 (7).
Se puede observar  que desde Octubre de 1935 o quizás antes *, el director percibía un salario elevado, en comparación con el resto del personal ($ 887) y que casi duplicaba el salario del Secretario ($460), en cambio sólo seis empleados percibían salarios superiores a $ 400, en tanto había numerosos empleados que percibían salarios bajos (59).
O sea la situación salarial del director, después de la rebelión de los paleontólogos  en 1930, habría mejorado sustancialmente, ya que Doello Jurado que con anterioridad ocupaba el cargo de Director interino, con un salario inferior al del Secretario del museo, pudo, seguramente después de la rebelión, obtener de las autoridades un cargo mejor rentado, y el puesto de Director “permanente”.
La rebelión en 1930 dejó como saldo una mejora de su situación profesional del director, pero dejó al descubierto el caos de los salarios de los empleados del MACN, que no lograron un incremento sustancial de sus haberes mensuales.
En Noviembre de 1925 la planta de empleados del MACN era de 41 y el presupuesto para salarios era de  $ 9191, hacia octubre de 1934 el rubro salarios del MACN representaba la suma de $ 13.084, y se había incrementado como consecuencia de la inflación a la suma de $ 15.090 en Marzo de 1937, con un plantel de  72 empleados, la mayoría mal pagos.

*Faltan en el Archivo MACN  varios libros de contabilidad anual, por lo que es imposible seguir la evolución del presupuesto del MACN.

Índice de las notas referidas a la Rebelión de los paleontólogos en 1930.


Hugo P. Castello, 2013.  MACN: en comisión en la Fundación de Historia Natural "Félix de Azara".



Monumento al paleontólogo Lucas Kraglievich en su ciudad natal de Balcarce, Provincia de Buenos Aires (Foto cortesía del Dr. Carlos Quintana, Mar del Plata).
Detalle de la placa al pie del mismo monumento( Foto cortesía del Dr. Carlos Quintana, Mar del Plata).


En los próximos cinco extensos artículos se analizan las causas y consecuencias de la denominada "Rebelión de los paleontólogos del MACN en 1930 que terminó con la destrucción del grupo de discípulos de Florentino Ameghino, con la renuncia, destitución  y muerte prematura de varios de ellos y la búsqueda de nuevos horizontes para el resto. 
El vacío dejado por este grupo de científicos y técnicos fue ocupado durante varias décadas  en el Museo por otros paleontólogos, que lamentablemente no alcanzaron el nivel académico previo y recién casi medio siglo después, con la llegada del paleontólogo José F. Bonaparte, proveniente de la Universidad Nacional de Tucumán en 1979, renace esta disciplina y florece en todo su esplendor.
Se trata éste del análisis mas serio realizado hasta el presente de las causas y consecuencia que tuvo la denominada “Rebelión”, dejando de lado cuestiones ideológicas y políticas de inicios de la década de 1930, que sin dudas deben haber jugado un rol importante en los hechos que se narran, pero sobre las cuales no hemos podido encontrar escrito alguno que permitan echar luz a estos sucesos.

Parte Ia. Cuatro relatos e interpretaciones de la rebelión: Antecedentes...

Parte II. Categorías, salarios, nombramientos inadecuados durante la dirección del Prof. Martín  Doello Jurado.

Parte III. Posibles motivos de la rebelión de los paleontólogos en 1930.

Parte IV. Categorías, y salarios  de los que firmaron la petición al Ministro Padilla contra el Director M. Doello Jurado, y como continuaron su vida profesional.

Parte V. La menguada producción científica del Prof. Martín Doello Jurado durante el período 1924-1930.

Artículos relacionados:

Los salarios de los empleados  del MACN en Marzo de 1937 y la situación salarial del Director del MACN después de la rebelión de los paleontólogos.

Los bajos salarios del Museo Nacional de Ciencias Naturales, el trastrueque de jerarquías, los nombramientos honoríficos: una larga tradición a lo largo de dos siglos que se mantuvo hasta la actualidad.



Parte Va. La Rebelión de los paleontólogos de la calle Perú.

Hugo P. Castello, 2012.  MACN:en comisión en la Fundación de Historia Natural "Félix de Azara".

La menguada producción científica del Prof. Martín Doello Jurado durante el período 1924-1930.

Según Parodiz (1949) que compiló la producción científica entre los años 1908 y 1940, Doello Jurado publicó un total de 50 artículos, la mayoría de los cuales (28)  en la revista Physis  (Soc. Arg. Cs. Nat.) y sólo dos en los Anales del Museo Arg. Cs. Nat.
Se nota claramente que su producción mermó considerablemente al asumir la dirección del Museo a partir de 1923.
Entre el período 1908-1922 publicó 40 artículos, y después de asumir en 1923 publicó 10, los cuales quedaron reducidos a tres en el período de 1923 hasta 1930 en que estalla la “rebelión” de los paleontólogos y siete en el período posterior de 1931-1940.
Aparentemente en el período 1940 a 1946 en que deja la dirección del museo, no habría publicado.
Se comprueba entonces que es correcta la observación hecha por el padre de Kraglievich (1933, Pág. 39) cuando afirma que  Durante los siete años (hasta 1930) de activa vida de la actual dirección no se ha publicado una sola página suya (referido a D. Jurado) en los Anales del Instituto”.
Si se compara esta situación con las de los directores previos como Burmeister (1862-1892) y Florentino Ameghino (1902-1911), quienes durante sus respectivas gestiones como  Directores del Museo publicaron centenares de trabajos científicos en los Anales del Museo, no hace falta hacer comentario alguno.
El propio Doello Jurado termina reconociendo hacia el final de su carrera  como director (1946), que su producción científica durante los años en que se construyó el edificio del museo fue baja, lo dice con estas palabras “…para poder atender, durante veinte años, la ímproba tarea científica, técnica y administrativa que representa la dirección del Museo en tales condiciones, ha tenido que sacrificar casi completamente su labor científica personal, para la cual había formado en el Museo mismo la importante sección antes citada ( …..), dejando que otros de sus ex alumnos o ayudantes utilicen libremente los materiales así reunidos….   ” (1)
Por otro lado es cierto que la tarea de construir el edificio del Museo, que debe haber sido muy intensa entre los años 1926 y 1933, en el periodo cuando se construyeron los únicos tres pabellones del MACN, debe haber insumido la mayor parte de la atención y energía del Doello Jurado.

Bibliografía
Parodiz, J  J. 1949. Martín Doello Jurado (1894-1948).  Physis, XX, no. 57:195-206.
Nota:
(1) Expediente E 901/945: extenso escrito del Prof. M. Doello Jurado al Señor Subsecretario de Instrucción Pública, Dr. C de la Rosa Igarzabal (12/7/1945) en descargo por las acusaciones de los empleados descontentos. 

Parte IVa. La Rebelión en 1930 de los paleontólogos de la calle Perú.

Hugo P. Castello.1992 MACN:en comisión en la Fundación de Historia Natural "Félix de Azara"

Categorías, y salarios  de los firmaron la petición al Ministro Padilla contra el Director M. Doello Jurado y como continuaron su vida profesional.


La revolución militar del 6 de septiembre de 1930 contra el presidente Hipólito Irigoyen contó con el apoyo de la prensa, de la clase alta, el ejército, los políticos conservadores y de parte de la clase media que dejó de respaldarlo tras la depresión y crisis económica mundial que afectó también a nuestro país. 
En el curso del golpe de estado, turbas de manifestantes ingresaron a la casa de Yrigoyen para saquearla. Hubo cierto apoyo popular y también entre el estudiantado universitario.
Eso puede haber llevado a que los "rebeldes" del Museo creyeran que sus reclamos iban a ser escuchados por las nuevas autoridades y que los vínculos previos del Director del Museo, Prof .Martín Doello Jurado, con los presidentes radicales Marcelo Torcuato de Alvear (1922-1928)  e Hipólito Yrigoyen (1928-1930), podían ayudar a defenestrarlo.
Doello Jurado habría contado durante la crisis con el apoyo del ex-Ministro de Instrucción Pública del gobierno de Alvear, Amtonio Sagarna, quien participaba de cuanto homenaje de hiciera en la sede del Museo, y también del General Justo, que sucedió al General Uriburu. El General Justo  fue luego presidente de la Nación (1932-1938). 
Tanto Sagarna como Justo eran coprovincianos y condiscípulos de Doello Jurado. Otra figura que terció a favor de Doello Jurado fue el ex Director del museo, Dr. Ángel Gallardo. (Parodiz &Balech, 1992).

Los firmantes de la petición al Ministro Padilla constituían en ese momento una parte considerable de la plana mayor de empleados estables del Museo Nacional junto con la totalidad de los integrantes de la Sección Geología y Paleontología, los cuales eran pagos con los fondos  supernumerarios. También firmaron algunos adscriptos honorarios y artistas.


El Dr. Roberto Raúl Dabbene (1865-1938),que era el único Doctor en Cs. Naturales del MACN y la máxima jerarquía científica del Museo, firmó la petición junto con los paleontólogos "rebeldes", quien según Parodiz y Balech (1992) fue "perdonado" por Doello Jurado.

El ornitólogo Dr. Roberto Dabbene, revistaba como Jefe de Zoología General, con un salario de $ 475 y era el único universitario con título de Doctorado en Ciencias Naturales, graduado en Italia. Había sido socio fundador de la Sociedad Ornitológica del Plata junto con Doello Jurado.

Según Parodiz y Balech (1992) , Dabbene firmó la petición junto con De Carles, con reticencia, algo que resulta difícil de creer.

El arqueólogo y arquitecto  Héctor Greslebin sentado junto a sus colegas en la Sala de Paleontología del recién inaugurado edificio del Museo, segundo a la izquierda con las manos cruzadas. El Dr. R. R. Dabbene: sentado 2o. a la izq., el Prof. M. Doello Jurado: con el sombrero en la falta, al medio, y a la derecha del director: el Secretario Pedro Serié. Parado y en 3a. fila  el ictiólogo, Aurelio Pozzi. Sentado y primero a la izquierda, en 2a. fila: Alberto da Fonseca, escultor, que acompañó a G. G. Simpson a la Patagonia (Foto A.H.MACN).

Héctor Greslebin, famoso arquitecto y arqueólogo que entre otros temas se dedicó a estudiar los túneles que corren por debajo de la ciudad de Buenos Aires. Era el Conservador de Arqueología, con un salario $ 342.

Enrique de Carles (¿1861?-1934). Naturalista viajero, con un salario de $ 340, ocupaba en 1924 un cargo idéntico en remuneración al del director Doello Jurado. Según algunos autores De Carles era considerado un comerciante catalán de historia natural y naturalista viajero. Se hizo conocido  organizando muestras de minerales argentinos y popularizando la enseñanza de la mineralogía a nivel escolar
Cándido Villalobos Domínguez, dibujante, salario $ 308.

Lucas Kraglievich, Ayudante de Paleontología, pago con fondos supernumerarios, salario $ 247.

Lorenzo J. Parodi, preparador de Paleontología, salario $ 61.75.

Carlos Rusconi, paleontólogo honorario.
El Huemul, acuarela de Magne de la Croix en el libro "Fauna de Mamíferos" de R. Parodi, 1937.

P. Magne de la Croix, (pintor de mamíferos), ocasionalmente recibía algún honorario por sus acuarelas de mamíferos y fósiles (2).
Enrique Deautier y Alfredo Steulllet eran Adscriptos honorarios a Ornitología del Museo, y habían publicado trabajos  sobre su especialidad.
Alfredo Castellanos, era un adscripto a la sección Paleontología y ocasionalmente cobró algunos fondos por realizar trabajos científicos en la Sección de Paleontología en 1925.

La diáspora de los paleontólogos en los años siguientes a 1930

El destino de los firmantes de la petición
Lucas Kraglievich,  junto con Julio Parodi, Julio Lorenzo Parodi, Alfredo Castellanos y Carlos Rusconi, habían formado parte de una nueva generación que trabajó en el museo hasta 1930 y habían recibido de Carlos Ameghino el legado de su hermano Florentino.
Al fracasar la petición en 1930 ya que no se abrió sumario alguno en contra del director, el Prof. Martín Doello Jurado continuó en su cargo, los firmantes presentaron una renuncia colectiva y tomaron distintos rumbos. Este grupo se desmembró y cada uno siguió caminos separados. Lorenzo Parodi fue el único exonerado.
Los primeros tres que se mencionan mas abajo fallecieron entre los dos y cuatro años de ocurrrida la "rebelión".

Lucas Kraglievich (1886-1932)heredero de la tradición ameghiniana, renunció y eligió el camino del destierro radicándose  en Montevideo, República Oriental del Uruguay, posiblemente en 1931, y trabajó ahí durante dos años, retornó muy enfermo al país y falleció el 13/3/1932. Un listado de sus trabajos publicados en paleontología fue publicado en 1934. 
Lucas Kraglievich, su esposa y su hijo Jorge, quien luego trabajaría también en el MACN en colaboración con el Dr. Osvaldo Reig. (Foto cortesía del Dr. Carlos Quintana, Mar del Plata).

Lorenzo Parodi (1857-1932), había trabajado desde el 1/3/1913 al 31/12/1930 realizando “trabajos especiales”, por sus excavaciones en Miramar y otros trabajos en la sección Paleontología. Era iletrado y su manejo del idioma español bastante precario. Consecuentemente, la correspondencia dirigida a su nombre le era leída por su hijo Lorenzo Julio. Se plegó a los denunciantes a través de una nota, pero como revestía como personal supernumerario del museo, fue dejado cesante en su puesto (Tonni et al., 1999) el 32/12/1930.
Se quedó sin salario alguno durante unos 6 meses. Al recurrir a la justicia, fue restituido por orden de un juez al museo, pero se le otorgó un cargo de Ordenanza el 1/6/1931, posteriormente ascendió el 1/9/1931 a Ayudante de 2ª. pero a los pocos meses, falleció de un paro cardiaco, el 29/2/1932. Al  respecto, Teófilo Kraglievich (1933) menciona que Lorenzo Parodi (padre)  falleció después de estos bochornosos sucesos de pena e indignación y como consecuencia de los mismos  y a la “condenable conducta de esa dirección que recompensó sus actos con la destitución en lugar de premiar sus méritos…”.

Enrique de Carles (¿1861?-1934), quien primero había sido un comerciante catalán y luego naturalista viajero del Museo, fue un fervoroso partidario de crear museos escolares. Según Parodiz fue perdonado, pero murió al poco tiempo. 

Rodolfo  C. Parodi, (1903- 2004) Había ingresado al Museo en 1920. Si bien no fue uno de los firmantes de la nota  el 29/7/1931 pidió el traslado a la Cárcel de Encausados, y posteriormente tuvo una destacada trayectoria en paleontología. En 1937 publicó su libro sobre mamíferos, magníficamente ilustrado por el artista Magne de la Croix, quien vió su entrada prohibida al MACN, despues de 1930. Parodi llegó a convertirse en la década de 1950 en Profesor de la Facultad de Ciencias Naturales de Salta, y mas tarde se desempeñó como director del Museo de Ciencias Naturales del Parque San Martín (Salta). Desde 1993 se fundó el Museo regional de Ciencias Naturales, que lleva el nombre de “Profesor Rodolfo Parodi Bustos “. Falleció en el 2004  Leer: el texto de una conferencia pronunciada en 1985 en el MACN, que titulo: "Mis diez años en el Museo Bernardino Rivadavia. Carlos Ameghino: un sabio amigo " donde narra aspectos desconocidos de esa década.

Lorenzo Julio Parodi, (1890-1969)  no fue uno de los firmantes de la nota, pero evidentemente resentido por lo ocurrido, también dejó el museo. Luego de un período en que se desempeñó en el Zoológico de Buenos Aires, en 1936 ingresó en la entonces División Paleontología de Vertebrados del Museo de La Plata, como preparador del paleontólogo, Dr. Rosendo Pascual y ascendió en 1949 a Jefe de Preparadores, cargo que mantendría hasta su muerte. Parodi era un autodidacta con un profundo conocimiento de los mamíferos fósiles, especialmente los del Cuaternario pampeano, constituyéndose en una segura fuente de conocimientos para en el novel Pascual, con una formación marcadamente geológica. Contrastando con sus extraordinarios conocimientos empíricos, la producción científica de Parodi fue escasa.

Lorenzo Julio Parodi en su lugar de trabajo en la entonces división paleontología de vertebrados del museo de La Plata (fotografía de mediados de la década de 1960).(Publicada en Ciencia Hoy, vol 11(62).

Alfredo Castellanos, hermano del conocido botánico Alberto Castellanos, ocasionalmente cobraba algún dinero por sus trabajos en la sección Paleontología del Museo.

Cuatro años después de alejarse del Museo, Castellanos publicó en 1934. “Conexiones sudamericanas en relacion con las migraciones humanas. Quid Novi?, 2, No. 6.

Si bien se graduó de médico en la Universidad Nacional de Córdoba, se volcó por entero a la paleontología y estratigrafía de los terrenos terciarios y cuaternarios de Santa Fé y de Córdoba. Posteriormente  se radicó en la ciudad de Rosario, donde creó y trabajó  en el Instituto de Fisiografía y Geología en la Facultad de Ciencias Exactas e Ingeniería de la Universidad del Litoral de Rosario. Retornó a trabajar en la Gran Barranca de Santa Cruz en Enero/Febrero de 1945. Falleció en 1973.

El Dr. Roberto Dabbene (1864-1938) , fue perdonado y continuó trabajando en el MACN. Posiblemente Doello Jurado no se atrevió a solicitar su exoneración. El gran prestigio de Dabbene , era el único universitario doctorado en el Museo, y el escándalo que hubiera ocurrido de haberlo hecho, deben haberlo frenado.

Carlos Rusconi (1898-1969) naturalista, arqueólogo, paleontólogo y geólogo,  quien a pesar de ser autodidacta había logrado su adscripción ad-honorem a la sección Paleontología del Museo Nacional de Buenos Aires desde 1919 a 1930.
Habiéndose traslado Kraglievich al Uruguay, en  1933 publicó "New Pliocene remains of diprotodont marsupials from Argentina". Jour. Mammal., 14:244-250.
El paleontólogo Carlos Rusconi (1898-1969)

En 1934, publicó - con su exclusivo esfuerzo personal - un boletín, del cual se editaron 32 números, y en julio de 1935, vio la luz en Buenos Aires la Revista Argentina de Paleontología y Antropología (Ameghinia), bajo su dirección. Desde 1937 a 1677 publicó un total de otros 13 trabajos.

Un análisis de las acusaciones contra Doello Jurado
Al leer las acusaciones realizadas en 1930 contra el director Doello Jurado se vislumbra que lo que era criticado era un estilo personalista de dirigir el museo, el cual se ha repetido a lo largo de las décadas por parte de quienes ocuparon el cargo de director y se ha prolongado hasta el presente.
Por decreto orgánico del Presidente Alvear y del Ministro Sagarna (28/12/1923) y en ocasión de cambiarse la denominación del museo a “Museo Nacional de Historia Natural Bernardino Rivadavia”, se promulgó la organización del Museo y de sus Estatutos con un total de 37 artículos y uno transitorio, que resultó ser el mas completo en su historia, el cual lamentablemente sólo se cumplió parcialmente en las décadas siguientes.
El Prof. Martín Doello Jurado reemplazó en la dirección interina a Carlos Ameghino (31/12/1923) pero no gozó de un salario para ejercer la función de director hasta el 1º. de enero de 1929, fecha en la que en el Presupuesto Nacional figuró, por vez primera, el cargo rentado de Director Nacional del Museo, pero  aparentemente no se habría realizado el correspondiente nombramiento.
Funcionó durante esos cinco años en la categoría de Director interino o “ad honorem” y gozaba de su salario como “Naturalista viajero”, que era inferior en monto al que percibía el Secretario y Habilitado,  o al del Ornitólogo R. Dabbene, lo cual no resulta  sorprendente porque a lo largo de sus 200 años de historia el Museo tuvo varios  directores interinos y períodos en el que museo funcionó sin director o con interventores, y con directores que no cobraban un extra por cumplir con esa responsabilidad. Una situación caótica que se ha prolongado hasta el presente
La falta de un Consejo Directivo del MACN constituido por los investigadores mas notables como se estila en los museos de Ciencias Naturales del H. Norte, la falta de consulta a los científicos durante  la preparación de los planos del edificio del Parque Centenario, la organización de costosos cocktails y discursos pronunciados en demasiadas ocasiones, los cargos mal remunerados, la falta de consulta previa al elaborar el proyecto anual de presupuesto y muchas otras acusaciones vertidas en la extensa nota dirigida al Ministro de Instrucción Pública, Dr. Ernesto Padilla
(27/10/1930) son creíbles, ya que  guardan una enorme semejanza con iguales acusaciones contra las autoridades del MACN en la década del 2000 al 2010.
Pareciera que no hubieran transcurrido siete décadas entre esa fecha y el presente y que las mismas situaciones se repiten.
Por otro lado es justo señalar la construcción del edificio del Parque Centenario fue un logro indiscutido de Doello Jurado, y que esta tarea tiene que haber acaparado su energía y atención  durante una buena parte de su gestión.

¿ Paleontología si o no?
El tema de si la disciplina de Paleontología debía ser la línea principal y única de investigaciones del MACN (posición aparentemente adoptada por Kraglievich)  versus el inicio de estudios de Oceanografía y otras disciplinas, es algo recurrente que hoy en día no se ha resuelto en un museo que no encuentra, aun después de 200 años de existencia, una función científica acorde con las necesidades de un país en vías de desarrollo, y que depende en realidad de la especialidad científica del director, que, durante su gestión, generalmente impulsa su disciplina científica en desmedro y por encima de todas las demás.
El MACN actual  en el 2012, al cumplir 200 años de su creación, es una institución dedicada netamente a la investigación paleontológica, tal como quedó demostrado por el hecho que el 50 % de los eventos académicos de los festejos del "bicentenario" durante el 2012 realizados a lo largo de tres días del mes de junio, estuvieron dedicados a la Paleontología, y en el hecho que la sala de Fósiles, es la exhibición, a lo largo de los años, que ha recibido las mayores inversiones para facilitar la incorporación de nuevos calcos de fósiles.
El actual Consejo Directivo del MACN electo a mediados del año 2012 entre investigadores de la Carrera del Investigador Científico del CONICET que tienen su lugar de trabajo en el museo, está integrado casi exclusivamente por paleontólogos y sólo dos de los directivos, el Director del Museo y un consejero, investigan en otros temas como aves  y ecología de invertebrados marinos, respectivamente.
El sueño de Lucas Kraglievich, se cumplió, paradójicamente, ochenta años después.

Bibliografía
Anónimo.1934. La antiguedad pliocena de les faunas de Monte Hermoso y Chapadmalal, deducidas de su comparaci6n con los que precedieron y sucedieron. Imprenta "El Siglo Ilustrado," Montevideo, pp. 1-136. (Un trabajo póstmo: páginas 1-16 dedicadas a la biografía y bibliografía del autor) .
Parodiz, J.J. y E. Balech. 1992. El Museo  Argentino de Ciencias Naturales "B. Rivadavia"... en pantuflas. Edición mimeo, Buenos Aires: 91 pp.    

miércoles, 12 de diciembre de 2012

Parte III. La Rebelión de los paleontólogos en 1930.

Hugo P. Castello, 2012.  MACN:  en comisión en la Fundación de Historia Natural "Félix de Azara".


Posibles motivos de la rebelión de los paleontólogos en 1930. Parte III.

 La investigación en Paleontología en el Museo Público de Buenos Aires iniciada por Hermann Burmeister en el período 1862-1892 y continuada durante el período de la dirección de Florentino Ameghino desde 1902 hasta su fallecimiento en 1911, dio como resultado más de un centenar de trabajos publicados sobre los fósiles pampeanos. Eso se tradujo en que los fósiles pampeanos fueran conocidos a nivel mundial. Las investigaciones en este campo sólo se vieron interrumpidas en el museo durante el  período de Carlos Berg (1892-1902), ya que si bien durante la dirección de Ángel Gallardo (1911-1916), éste dio  impulso al estudio de las hormigas, los estudios paleontológicos fueron continuados al ser designado (1/6/1923) Carlos Ameghino como Jefe de la Sección Geología y Paleontología, y mas tarde bajo la dirección interina y honoraria del mismo desde el 11/8/1919 hasta el 17/12/1923, cuando renunció a la dirección del Museo.
Ya en 1916 siguiendo los consejos de Eduardo Holmberg, el joven Lucas Kraglievich se había incorporado al Museo Nacional de Historia Natural de Buenos Aires, como “adscrito honorario”, y ahí tuvo oportunidad de conocer a Carlos Ameghino, quien se convirtió en su maestro.

Tres años después se le nombró ayudante técnico de paleontología supernumerario. Sus retribuciones económicas siempre fueron modestas o inexistentes (Ver situación salarial de Lucas Kraglievich), por lo cual debió procurarse el sustento como profesor en institutos particulares, sin embargo, ello no fue nunca causa de desaliento ni obstáculo para sus investigaciones (Azpiri, sin fecha).

El sucesor de Carlos Ameghino en la dirección del Museo afines de 1923 fue el Prof. Martín Doello Jurado, quien se ocupó de la dirección del museo durante dos décadas (1924-1944) y además de ocuparse a la construcción del nuevo edificio decidió dar impulso a los estudios de oceanografía.

Con el pasar de los años, Kraglievich se habría de convertir científicamente en el sucesor de Florentino y de Carlos Ameghino, y pasó a ser el más prolífico autor del Museo, ocupando desde 1925 hasta 1929  la Jefatura de la Sección Paleontología, en reemplazo de Carlos Ameghino.
.De acuerdo al relato de uno de los allegados de Carlos Ameghimo,éste sufría de ataques de depresión, que lo obligaban a solicitar licencia, por lo que Lucas Kraglievich  llegó  a estar interinamente a cargo de la dirección del Museo en 1921 durante un breve período.
Según algunos autores este antecedente, sumado al prestigio científico que había alcanzado, a pesar de su juventud, lo habrían impulsado a tratar de destronar al director Doello Jurado.
Sin embargo del análisis de los salarios que se pagaban durante la década de 1920 en el Museo surgen otros posibles motivos.

En total Lucas Kraglievich, a pesar de  fallecer tempranamente, había creado 21 familias y subfamilias de vertebrados fósiles y 74 géneros y subgéneros de mamíferos y aves, descubiertos y estudiados por él mientras elaboraba su imprescindible "Manual de Paleontología Rioplatense". (Kraglievich, 1934)

La situación salarial de Lucas Kraglievich

Si bien el número de empleados en el Museo Nacional  había crecido sustancialmente, los cargos para investigadores eran sumamente escasos y la totalidad estaba mal pagos.

Poco o nada se ha escrito sobre el salario que percibió Lucas Kraglievich durante el período de 15 años en que se desempeñó en el Museo Nacional. Es sabido que Kraglievich debió procurar ingresos extras dictando clases en colegios secundarios (Lertora, sin fecha). También se ha mencionado que recibió una oferta para trabajar en el Museo de Cs.Naturales de La Plata y que la rechazó. Sin embargo existe en la colección de dicho museo material paleontológico colectado y/o clasificado por L. .Kraglievich.

Al poder revisar el Archivo Histórico del MACN ahora sabemos que los salarios del personal de planta permanente del Museo Nacional de Historia Natural en el año 1924 eran sumamente bajos y que  variaban entre los $ 475 y los  $ 92.

Lucas Kraglievich (campera blanca, 3o. a la izq.) y el equipo del Museo en las barrancas de Miramar, 26 de Marzo de 1928. (Foto Archivo MACN). La persona sentada por encima de ellos y con boina blanca, podría ser Lorenzo Parodi.

En Febrero de 1924, al comienzo de la dirección del Prof. M. Doello Jurado había en el Museo un total de 41 empleados de planta permanente, de los cuales sólo tres percibían un salario elevado (para aquella época) de $ 475 (El Secretario, Agustín Péndola; el Jefe de Zoología General, Dr. Roberto Dabbene; y el Jefe de Geología y Paleontología, Carlos Ameghino). El prosecretario, Juan M  Péndola, (hijo del Secretario), ganaba $ 342.

El Director interino, Doello Jurado, que revestía como “Naturalista viajero”, junto con el otro naturalista, Enrique de Carles, ganaban $ 351,50 c/u,  y luego le seguían los conservadores, preparadores, ayudantes, y guardianes con salarios variables: $ 342 (5), $ 331(1), $ 308 (3), $ 247 (4); $199,50 (2); $ 212 (1) $ 199,50 (3); $ 185,50 (5), $ 152 (12) y $ 92.60 (2).

En total la partida del presupuesto nacional para salarios del Museo en 1924 era de $ 9477,15.

Para otros gastos el Museo contaba con una partida de $ 2947.16, por lo que el total  del presupuesto mensual para el  mes de Febrero de 1924 fue de $ 12.424,31., sin contar una reducida partida para gastos supernumerarios.


Partida especial para contratar empleados supernumerarios

El recurso de contar con empleados no contemplados en el presupuesto nacional del gobierno argentino no es de ahora, ya que por ejemplo el gobierno de Figueroa  Alcorta (1906-1910), como medida de austeridad, declaró cesante a los empleados supernumerarios del gobierno nacional no bien asumió la Presidencia en 1906.
El 23 de Febrero de 1923 durante la Presidencia del Dr. Marcelo T. de Alvear (1922-1928) se dictó un Acuerdo del Superior Gobierno (fecha del 23 de Febrero de 1923) en el cual se contempló una partida del presupuesto que le permitió al Museo Nacional de Historia Natural contratar personal supernumerario,  entre ellos a Lorenzo Parodi ($ 239), (Trabajos de campo y de exploración y extracción de fósiles en Miramar), Aníbal Cardoso ($ 138) (Catalogación de monedas), Juan B. Serié ($ 28.50) (Trabajos en Botánica), Lucas Kraglievich ($ 247) (Ayudante de Paleontología), Carlos T. Simms ($ 199.50) (Ayudante de biblioteca)  y el portero Teodoro Chidichino Sólimo ($ 152). En Julio de 1925 con esos fondos la Secretaria del Museo abonaba además de esos salarios otros pequeños gastos como la confección de acuarelas, acarreo de materiales, trabajos de peones, se compró una colección científica, se le abonó a la traductora Carla V. Muller, y se pagaron trabajos de fichaje en la biblioteca, etc. por un monto total de 1356 pesos.
El salario del “ayudante de paleontología”  Lucas Kraglievich era en 1924 el equivalente al salario de alguno de  los  preparadores del Taller como  Antonio Pozzi, Ángel Zotta o Juan B. Serié.

Del análisis de los salarios abonados en el año 1924 surge que el Director del Museo ganaba menos que el Secretario y que el paleontólogo Lucas Kraglievich ganaba sólo el 52 % del salario mas elevado del Museo, aproximadamente 90 pesos mas que un portero, con el agravante que éste no formaba parte del personal de planta permanente y podía ser despedido en cualquier oportunidad.


La Sección de Geología y Paleontología

La Sección de Geología y Paleontología en 1924 estaba cargo de Carlos Ameghino (salario de $ 475) y contaba con cuatro empleados: dos de ellos (hijos de Lorenzo Parodi) se desempeñaban como “Ayudantes de preparador”: Lorenzo J. Parodi (que realizaba un reemplazo y gozaba de un salario de $ 92.62) y Rodolfo C. Parodi ($ 92.63).
Los honorarios de L. Parodi y de L. Kraglievich se cargaban a la partida de gastos supernumerarios, a saber: Lorenzo Parodi (padre) todos los meses percibía la suma de $ 239.30 por sus trabajos a campo explorando fósiles en los yacimientos fosilíferos de las barrancas de la localidad costera de Miramar, por lo tanto ganaba casi igual que Lucas Kraglievich, pero que a diferencia de éste publicaba menos y pasaba mas tiempo a campo. Su hijo Lorenzo J. realizaba “trabajos técnicos en horas extras en la sección Paleontología " y cobraba un extra de $ 156.
Lucas Kraglievich podía adicionar en forma ocasional a su salario de $ 247 lo que hoy llamaríamos viáticos para salir a campo, por ejemplo explorar las márgenes del río Carcarañá o a la localidad de Maipú.
Se podría resumir diciendo que la situación salarial de la mayor parte del personal del museo en 1924 era mala, y que en la sección Paleontología, con excepción de Carlos Ameghino, que gozaba de uno de los tres salarios mas elevados del museo, el resto eran salarios precarios y dos de ellos en puestos  inestables, donde los salarios no eran proporcionales a las funciones que cada uno de ellos desempeñaba, en especial no se retribuya  la mayor producción científica.

 Bajo la Presidencia del Gral. J. B. Justo (1932-1938), Doello Jurado encontró apoyo entre los ministros lo que le permitió que el personal en todas las categorías aumentara considerablemente (en número) y se inauguraron nuevas salas de exhibición.  A criterio de Parodiz y Balech (1992), “ a pesar de todo el progreso que Doello trajo al Museo, el gran problema seguía siendo el presupuesto…Unos de los cargos que siguieron haciéndose al director, después de la rebelión y hasta el fin  de su gestión al frente del Museo, fue precisamente que para tener personal creaba pequeños puestos con retribuciones mezquinas, que había una cantidad de supernumerarios sin designación oficial e, incluso que llegó a desdoblar un salario de cierta importancia para reemplazarlo por dos sueldos pequeños. Pero nunca fue fácil conseguir dinero para el museo, considerado una institución de lujo que no da dividendos económicos de importancia”.
El del Museo no era, por lo tanto, un sistema que funcionara en base a la meritocracia, y en parte Parodiz y Balech (opus cit) en el párrafo anterior reconocen, indirectamente, algunas de las imputaciones realizadas por los “rebeldes” del año 1930.  Muchos años después, cuando se habría de producir la segunda rebelión de empleados y durante la misma, el Director Martín Doello Jurado reconoció parcial pero tardíamente.,  algunas de las acusaciones de los "rebeldes" de las décadas del 30´ y 40´.


Bibliografía

Azpiri, J. L. Muñoz, sin fecha. Aventureros por Naturaleza: Lucas Kraglievich (1886-1932). www.pensamientonacional.com.ar/docs.php?idpg=azpiri/0014_aventureros_por_naturaleza.html - 21k
Kraglievich, L.1934. La antiguedad pliocena de las faunas de Monte Hermoso y Chapadmalal, deducidas de su comparaci6n con los que precedieron y sucedieron. Imprenta "El Siglo Ilustrado," Montevideo, pp. 1-136. (Un trabajo póstumo: 1-16. dedicado a la biografia y bibliografia del autor )
Lertora, C. sin fecha. LUCAS KRAGLIEVICH (1886-1932). 
Parodiz, J .J. y E. Balech. 1992. El Museo Argentino de Ciencias Naturales “B. Rivadavia”…en pantuflas. Edición Mimeografiada, Buenos Aires: 90 pp.